Por fin llegaron los tan esperados meses para disfrutar de los exquisitos chiles en nogada en todo su esplendor. Suaves, picantes, una mezcla entre lo dulce y lo salado, entre lo picante y lo cremoso, una verdadera explosión de sabores en cada bocado; uno de los más maravillosos placeres de la gastronomía tradicional mexicana que podemos disfrutar esta temporada.
Como la gran mayoría de las recetas de la cocina mexicana, los chiles en nogada también tienen su maravillosa historia detrás de esa exquisita preparación que nos habla de tradición, herencia cultural y de nuestra propia historia como país.
Existen diversas versiones acerca del origen de esta tradicional receta; en alguna de ellas se dice que fue preparado para celebrar el cumpleaños del caudillo independentista Agustín de Iturbide por las monjas del convento de Santa Mónica en Puebla; sin embargo el arqueólogo Eduardo Merlo niega esa versión en su artículo “El mito de los chiles en nogada y la bandera de las tres garantías” y asegura que era un platillo que ya existía pero no como plato principal, sino como postre.
Según el arqueólogo, el origen de este platillo se remonta a la época del Virreinato de la Nueva España, en donde los primeros pobladores, en su mayoría, eran andaluces. También se decía que las monjas eran las mejores cocineras y reposteras, por lo cuál eran las encargadas de elaborar los platillos para las grandes fiestas de la corte novohispana, ya que tenían la costumbre de celebrar con banquetes abundantes y variados de al menos 14 tiempos.
Para los banquetes de la corte novohispana, las monjas inventaban nuevos platos para que sus clientes pudieran presumir que era la primera vez que se servían dichos postres, y fue así como, de manera fortuita, se crearon los chiles en nogada.
Era común en España rellenar los pimientos con algo y, por ello, a las monjas se les ocurrió rellenarlos con fruta fresca y capearlos para presentarlos como postre; el cuál fué conocido como Chile relleno de frutas bañado en salsa de nuez.
Después de la lucha de Independencia y tras haber firmado el Plan de Iguala, Iturbide llegó triunfante a Puebla, y con motivo de su cumpleaños, las monjas le habían preparado un festín ofreciendole el Chile relleno de frutas y, tras este acto, el platillo se fue popularizando; sin embargo, a medida que la economía del país no permitía realizar festines, se vieron obligados a reducir los tiempos de las comidas y el Chile en nogada paso de ser postre a ser plato fuerte cuando decidieron agregarle carne al relleno.
En meatme nos preocupamos por mantener la receta tradicional y por ello tenemos para ti la mejor receta de los Chiles en nogada lista para disfrutar en cuestión de minutos; además de que su empaquetado individual los hace súper fáciles de guardar. Aprovecha y disfruta de este exquisito platillo de la cocina mexicana, sin pasar horas cocinando y degustando su característico sabor.